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martes, diciembre 29, 2009

Matar dos pájaros de un tiro


“Matar dos pajaros de un tiro”, que misterios esconderá el origen de tan vanagloriada frase, pues este es al parecer el argumento enarbolado por las cementeras a la hora de justificar la incineración de residuos en sus plantas. ¿Y eso como puede ser?
Dicen es valorización de combustibles alternativos la incineración en los hornos de cemento de todo tipo de residuos: lodos de depuradora, neumáticos, harinas cárnicas, plásticos, aceites industriales, etc. muchos de ellos tóxicos, porque del combustible que se venía utilizando, que eran combustibles fósiles de muy baja calidad, coques de petróleo principalmente, contaminantes y de emisión de gases de efecto invernadero, se sustituyen por residuos, claro que estos son también contaminantes e incluso peligrosos, “de Guatemala a guatepeor”.
En cualquier caso la cementera obtiene varios beneficios, se ahorra una parte de la compra de combustibles derivados del petróleo al sustituirlos por residuos, cobra como gestor de los residuos incinerados y se descuenta en las cuotas de CO2 las emisiones originadas por los residuos. Mandando al garete los principios de sostenibilidad en cuanto a gestión de residuos, que son por orden de prioridad: generar la menor cantidad posible, si se generan, reusar y reutilizar,y si no se puede, entonces reciclar y como última instancia, eliminar mediante incineración o vertedero, siempre que no haya alternativa, pero no como la primera opción.
Reducción, Reutilización y Reciclaje ,las famosas 3R de todo manualillo medioambiental que se precie, supongo que se queman residuos antes de que se agoten las posibilidades de reutilización y de reciclaje, porque la incineración es rentable desde el primer día y se obvia que es de obligado cumplimiento respetar la jerarquía señalada por diferentes Directivas Europeas y leyes sobre Residuos, es decir: 1º Prevención, 2º Reutilización, 3º Reciclaje incluido compostaje, 4º Otros tipos de valorización y 5º eliminación. Claro que al parecer el convenio de Estocolmo no solo lo contempla sino que lo considera “valorización energética” al referirse a la incineración: considera que si las cementeras queman residuos en sus hornos, de forma ‘controlada’(de todos es sabido la gran capacidad de control de nuestras administraciones ¿verdad?), además de recuperar energía están haciendo un servicio para la comunidad, pues de otra forma estos residuos se quemarían en vertederos abiertos y se emitiría más dióxido de carbono, causante del efecto invernadero. Pero es que en Montcada ya decidimos que no tendríamos una incineradora como solución a nuestros residuos, ¿O no? Tengo una especie de “deja vu” con toda esta temática de lo más curioso.
Tampoco parece cierto que los residuos que pretenden incinerar no se puedan reciclar. El ejemplo lo tenemos con los neumáticos, que se puede recauchutar, trocear, recuperar sus metales, triturarlos e introducirlos en el asfaltado, etc. El negocio viene entre otras cosas precisamente del cobro de tasas a esos residuos, pero a nadie se le escapa que la incineración es la forma más insostenible y peligrosa de tratar los residuos, puesto que no los elimina, sino que los traslada y dispersa, liberando a la atmósfera nuevos compuestos resultantes de la combustión, –dioxinas, furanos, metales pesados, hidrocarburos aromáticos policíclicos,..- que son las sustancias tóxicas y cancerígenas mas peligrosas que se conocen (mucho más contaminantes que los materiales de partida).¿¿Y esto como puede ser??¿¿Cómo se permite??Aiiss no lo entiendo.
Lamentablemente, no se trata de una situación excepcional, esta cementera en concreto al parecer tiene un par más de frentes abiertos en Levante y en Toledo con el mismo conflicto en sendos municipios y sus competidoras directas otro tanto en toda España, y en Euskadi llevan ya un tiempo de los pelos con esta temática…(Aiba la ostia).
Las cementeras se dedican a demostrar que en el horno de clinker las emisiones contaminantes no son superiores al combustible fósil convencional, o sea que no contamina más de lo que ya venían haciendo. ¿Y ya está?¿Con esto nos tenemos que conformar?
Y la Administración en vez de ser mucho más restrictiva a la hora de conceder autorizaciones para coincinerar residuos, sobre todos los peligrosos, agotan los recursos financieros para alternativas de reducción, reutilización y reciclado, pagándoles como gestores de residuos, y olvidan la prevención de la generación de residuos y los otros enfoques para el manejo de residuos.?
En definitiva, las incineradoras agudizan los problemas que pretenden resolver. En vez de poner límite al incremento continuo de las basuras, incitan a producir más combustible residual para alimentar sus hornos y al parecer ni siquiera es válido el argumento de que recuperan energía o reducen su consumo.
“Matar dos pájaros de un tiro”, que bien aplicada esa frase si tenemos en cuenta las consecuencias de la incineración de residuos, ¿Verdad¿¿De verdad no existe una alternativa mejor??

martes, diciembre 15, 2009

Parc de la Serralada de la Marina


En busca de un poquito de paz y sosiego, no son pocos los que se aventuran en sus momentos de ocio a adentrarse en la montaña más cercana a montañear, caminar y cansar esas carnes no siempre tan prietas como quisieran.
Hállame yo entre ese colectivo, me agrada deambular por la “Serralada de la marina”, por ser como soy una afortunada por tener tan al alcance de mi casa un parque natural.
Dicha práctica no obstante se complica durante varios periodos del año. Y es que no son pocas la ocasiones en las que en mi deambular, alegre y despreocupado me he encontrado con señores cazadores y sus perros, aquí o allá, muy amables todo sea dicho de paso, que en más de una ocasión me han reprendido por mi mal actuar al alegremente deambular por dichos lares, los cuales según me indican son coto de caza habitual.
Yo ya intento integrar en mi indumentaria habitual montañil los colores rojos y llamativos por si acaso, e incluso otro tanto hago en decorar festivamente a mis mascotas con sendos pañuelicos de vivos colores. Pero todo y con ello, no son pocas las ocasiones en las que más de un susto me he dado, y si la niebla abraza el parque ni por asomo, asomamos nuestras carnes, no tan prietas ya , por el parque.
El parque natural de la serralada de la Marina, se extienda por unas tres mil hectáreas, está formado por Badalona, Santa Coloma, Montcada i Reixac, Tiana y Sant Fost, y según tengo entendido es en los tres últimos donde se caza. En Badalona y Santa Coloma la caza está prohibida, es más me consta que La Sociedad de Cazadores Badalona, que salían a cazar en las montañas y campos de Badalona, (San Jerónimo de la Murtra y Montañas de Can Ruti) puesto hasta hace pocos años eran terrenos libres, actualmente no cazan en esa zona porque hoy es Parque Natural de la Serralada de Marina. Me sigue desconcertando porque ciertas decisiones son inviables en nuestra querida Montcada pero no en otros Municipios
Pero en Montcada sí se caza, e incluso dicen cazan jabalíes, conejos y perdices; quizá más cosas, porque personalmente he presenciado sueltas para reforzar las poblaciones de perdiz y faisán en el mismo cortafuegos de camino a las fuentes subiendo desde Montcada. Y no solo eso, yo he sido victima del acoso de un faisán despendolao y desorientado que me debió confundir con la buena moza de la granja donde creció porque me estuvo siguiendo un buen tramo del camino, bien cerca de las zonas habitadas del parque. Podéis imaginar mi acollone mayúsculo por aquello del fuego cruzado, en fin.
Personalmente me he encontrado con conejos, faisanes, perdices, un par de lagartos de un color verde casi fosforito, a los cuales les debí parecer un ser de lo más extraño, por el color pálido supongo, rato se tiraron impávidos mirándome de lo más intrigados. También me crucé en una ocasión, a bastante distancia gracias a dios, a un jabalí tamaño morlaco, susto me llevé collingas. En otra ocasión me crucé con un lagarto de cola larga, una serpiente e incluso con una mama pato y su retahíla de patitos, desconcertante porque pensé que crecían cerca de agua. En definitiva una amplia fauna diversa y variada, a parte por supuesto de un sinfín de ciclistas, con sus robustas cachas e incansable aliento, senderistas, y montañeadores en general, especies estas últimas en serio peligro de extinción por el cartucho perdido de algún cazador efusivo.
Porque curiosamente la ley de esta actividad no permite disparar en caminos, zonas habitadas y entornos de las viviendas, y en más de una ocasión se han denunciado los peligros que la práctica de la caza deportiva -ya sea furtiva o no- conlleva en un paraje protegido como es un parque Natural: seguridad de las personas, riesgos para la fauna y contaminaciones incompatible con sus valores ambientales y su uso público y turístico, en especial en un parque periurbano, ya que la mayoría de su perímetro está rodeado por suelo urbano, y esto hace que muchas personas y turistas visiten el parque natural como lugar de esparcimiento y contacto con la naturaleza.
En fin, Montcada is diferent, no? a no calla que es que los cotos de caza implican unos cobros anuales de cuotas de sus asociados que sin duda algo comportarán a las exiguas arcas de este ilustrísimo ayuntamiento.